En 2024, la Unión Europea alcanzó un hito histórico en su transición energética: por primera vez, la energía solar superó al carbón en la generación de electricidad, representando el 11% del mix eléctrico frente al 10% del carbón. Este logro subraya el compromiso europeo con las energías renovables y la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.

España ha sido protagonista destacado en este avance. Durante 2024, la energía solar generó un récord del 21% de la electricidad en el país, un incremento del 23% respecto al año anterior, consolidando a España como líder en crecimiento de producción solar en Europa por segundo año consecutivo.
Este incremento en la generación solar ha contribuido significativamente a la reducción de emisiones de CO₂ y ha permitido un ahorro estimado de 59.000 millones de euros en importaciones de combustibles fósiles desde 2019.

A pesar de estos avances, la Unión Europea enfrenta desafíos para mantener y acelerar esta tendencia. Es esencial invertir en tecnologías de almacenamiento y flexibilidad en la red eléctrica para gestionar la intermitencia de las fuentes renovables y asegurar un suministro energético estable y sostenible.

La superación del carbón por la energía solar en Europa marca un punto de inflexión en la lucha contra el cambio climático y refuerza el liderazgo europeo en la adopción de energías limpias. Con políticas adecuadas y una inversión continua, la región está bien posicionada para alcanzar sus objetivos de neutralidad climática en las próximas décadas.